Stromboli (o pancitos rellenos)

¡Cómo me gustan las harinas! Nada mas tentador que el olorcito a pan horneándose. 

Tengo una panadería en la esquina de casa y cuando empiezan a hornear tipo 6 AM, ese olorcito llega hasta mis sueños deseando que el panadero me toque el timbre con una bandeja llena de medialunas calentitas y pan. Pero el hecho de tener una panadería tan cerquita no me quita las ganas de amasar y hornear mis propias delicias.

Hace poco mi Nain (abuela) me prestó su máquina de hacer pan, ¡qué emoción! Hicimos la primer prueba con una masa simple de pan. Allí estábamos, mis hijos y yo, viendo esa gran maravilla que nos prometía pan calentito en unos minutos. Pusimos todos los ingredientes, la prendimos y chusmeamos cada dos minutos por la ventanita. Esperamos y esparamos hasta que nos cansamos y decidimos esperar a que la máquina nos avisara que ya podíamos deleitarnos con nuestra creación. Peeero, cuando fuimos en busca de nuestro pancito calentito, resulta que sólo era un gran bollo de masa super-leudado!!! La máquina no funcionaba!!!! Amasó y todo como debía pero se ve que algo le pasaba, porque no cocinó. Asi que tuvimos que aguantarnos un rato mas el antojo y esperar a que el horno convencional hiciera lo suyo. 

¡Qué rico! tener la posibilidad de comer algo hecho en casa. Por eso, les comparto esta receta de Stromboli, pancitos de origen italiano rellenos de ajo picado, albahaca y queso, ¡una delicia!

Stromboli

(Salen 12 rollitos aprox)

Masa:
1/2 kg de harina
5 gr de levadura en polvo (o medio cubito de la fresca)

10 gr de sal
300 cc de agua tibia
30 cc de aceite

 

Relleno:

200 gr de mozzarella

1 diente de ajo picado

hojas de albahaca fresca

sal gruesa

 

 

Mezclar la harina y la sal. Agregar la levadura, el aceite e ir incorporando el agua de a poco. Amasar hasta obtener un bollo suave. Dejar reposar tapado hasta que duplique el volumen.  

 

Estirar un rectángulo y esparcir por toda la masa el ajo picado, la mozzarella y hojas de albahaca fresca. 

 

Enrollar como un pionono y cortar los rollitos. Un truquito para que salgan parejos es ir haciendo marquitas (sin cortar) con un cuchillo: marcan primero el medio, luego el medio de cada porción y así hasta que tengan los 12 rollo marcados. Para cortarlos es mejor usar hilo dental o cualquier hilo que tengan. Deslizan el hilo por debajo de la masa, llevan por encima, cruzan y tiran del hilo hasta cortar la porción, así no se aplastan.

Acomodarlos en una fuente apenas aceitada con el relleno para arriba. Pincelar con aceite de oliva y espolvorear un poquito de sal gruesa. Dejar leudar nuevamente y cocinar en horno fuerte hasta que estén dorados. Mas o menos 20 minutos y ¡a disfrutar!

Notas: 

• Pueden reemplazar el relleno por lo que tengan y les guste: agregarle tomates secos, o hacerlos de espinaca y ricota, pimientos cocidos y ajo picado. Las posibilidades son tan amplias como su imaginación